Hoy quiero hablarles de algo que me parece fascinante: la danza contemporánea. No es solo un arte; es una forma de conectar con nosotros mismos y con los demás de una manera muy profunda.
Cuando pienso en la danza, me viene a la mente esa frase que dice que “creo en una danza instinctiva, orgánica, expresada desde lo más profundo de nuestro inconsciente”. ¡Y es tan cierto! La danza no tiene que ser perfecta; se trata de dejar que nuestras emociones fluyan.
Cada movimiento puede contar una historia, reflejar nuestras vivencias y, a veces, incluso mostrar partes de nosotros que ni sabíamos que estaban ahí. Es como un viaje a través de nuestros recuerdos, sueños y sentir.
En la danza contemporánea, la técnica se encuentra con la expresión personal. No hay límites. Puedes moverte como te plazca, a tu ritmo, dejando que tu cuerpo hable lo que tu mente a veces no sabe expresar. ¡Es liberador!
Así que creo que todos deberíamos darnos un chance de explorar este arte. Ya sea tomando una clase, disfrutando de una performance o simplemente moviéndonos en nuestra sala de estar. La danza es un lenguaje universal que, al final del día, nos conecta como seres humanos.
Así que, ¿te animas? ¡Déjate llevar por la danza de tu inconsciente! 💃✨
